Después de que las hojas caídas, las ramas muertas, las ramas de los árboles y la paja son trituradas por el pulverizador de paja, se cargan en una máquina de pellets de paja, que se puede convertir en combustible de alta calidad en menos de un minuto.

“Los desechos se transportan a la planta para su reprocesamiento, donde se pueden convertir en combustibles solidificados de alta calidad que pueden quemarse.

Parte de la paja del campo puede devolverse al campo tras ser triturada, pero la mayoría de los residuos agrícolas y forestales se vierten directamente en zanjas y ríos. Estos residuos pueden transformarse en tesoros mediante el tratamiento de solidificación, lo que permite la reutilización de recursos.

En la planta de producción de combustible de biomasa solidificada de Kingoro, dos máquinas del taller funcionan a alta velocidad. Las astillas de madera transportadas por el camión se cargan en la peletizadora de paja, que las convierte en combustible solidificado de alta densidad en menos de un minuto. El combustible de biomasa solidificada se caracteriza por su pequeño volumen, alta densidad y alto poder calorífico. Por efecto de la combustión, 1,4 toneladas de combustible de biomasa solidificada equivalen a 1 tonelada de carbón convencional.

El combustible de biomasa solidificada puede utilizarse para la combustión baja en carbono y azufre en calderas industriales y civiles. Se utiliza principalmente en invernaderos de hortalizas, porquerizas y gallineros, invernaderos de cultivo de hongos, zonas industriales y pueblos y ciudades para calefacción. Permite ahorrar energía y reducir las emisiones, además de tener bajos costos. Su costo de producción es solo el 60 % del del gas natural, y las emisiones de dióxido de carbono y dióxido de azufre tras la combustión son prácticamente nulas.

Si los residuos agrícolas y forestales se pueden aprovechar, también se pueden convertir en un tesoro y pasar a ser un tesoro a los ojos de los agricultores.